¡Basta ya! Alto a la obesidad (*Auto Reseña/Crítica)

¡Basta ya! Alto a la obesidad (*Auto Reseña/Crítica)

Dramaturgia: Katherine LaPey Peytrequín y Cristina Barboza

Dirección: Cristina Barboza

Fecha: 29 may0 2020, 17 hrs

Lugar: Facebook Live de Raíz Teatro

Agrupación: Raíz Teatro

Hora de inicio: 17:03 hrs

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Ansiedad y Asombro.

¡Basta ya! Alto a la obesidad es un biodrama que llevo presentando desde el año 2017. Lo escribimos entre Cristina Barboza (quien además es la directora del espectáculo) y yo durante un proceso de creación que duró unos 6 meses.

Llevo dos años prestándome en diferentes lugares: sala de teatro, casas de habitación, centros culturales; y ahora: en la virtualidad. ¡Cada función es tan emocionante! Y cómo no va a ser emocionante si me expongo frente al público tal cual soy, con cada sentimiento, con cada kilo.

Particularmente haber sido contratada para esta presentación, primero me hace creer en que sí existen organizaciones interesadas en el trabajo artístico; segundo, que el trabajo de Raíz Teatro es reconocido y tercero, me vino a confirmar que estamos en un momento de cambio con el que sigo en conflicto. ¿Es teatro eso que se ve a través de la cámara aunque sea en vivo? Para mi no. Sin embargo haciéndolo comprobé que todas las tareas de producción (para hacer la presentación) y los nervios que se sienten antes de iniciar; fueron semejantes a lo todo lo que pasaba y sentía cuando se iba a salir a escena, antes de la pandemia por el Covid19.

Pero insisto que fue semejante, jamás igual. ¿Qué fue definitivamente lo que no pasó en la virtualidad que sí pasa durante una presentación de teatro (y no pongo “teatro en vivo” porque para mi esa frase es una redundancia. El teatro es vivo, es el arte del aquí y del ahora)? Pues la energía que se crea entre la persona intérprete y el público. Esa energía, esa sinergia, esa complicidad, esa compañía, esa existencia que solo se crea con la presencia de ambas partes en el mismo lugar.

En esta presentación, las acciones que no me hicieron muy feliz fueron:

Imagen. No la mía, la de la cámara de mi computadora. Tengo una computadora con una cámara muy básica, ergo, la imagen de transmisión no es tan perfecta y maravillosa como sí se lograría con buen equipo audiovisual. Esta virtualidad nos está lanzando, a las personas teatreras, a presentarnos a través de una cámara, así que una primera – gran - inversión (para un sector teatral que se quedó sin trabajo hace cuatro meses) sería para tener una buena cámara con la cual transmitir. Y con ella, trípode o un aparato para ajustar la cámara en diferentes niveles y que le permita cierta movilidad. Y bueno, soñando demasiado, dos cámaras...pero entonces, ¿se podría hacer una transmisión en vivo en alguna red social a doble cámara? (creo que aún, no)

Sonido. La situación es similar que con la cámara. A pesar de que no me molestó completamente el sonido que tuve; sé que puede estar mejor (nítido) y para esto se requiere de un equipo especial. Segunda – gran – inversión para nuestro medio: micrófonos para las transmisiones.

Luz. Intentamos hacer un montaje de luces con lo que teníamos. No fue el mejor (se nota en la imagen). Así que, aquí una tercera – gran – inversión para quienes desean hacer teatro virtual: luces para presentarnos frente a la cámara.

Sentada o de pie. Como no contaba ni con un trípode y mucho menos con una persona camarógrafa; estaba en la indecisión de si presentarme siempre de pie o siempre sentada. Cada posición tenía sus pro y sus contra. De pie podía moverme en el espacio pero estando lejos de la cámara, así que se perdían detalles. Sentada estaba frente a la cámara y podría trabajar en detalles gestuales; pero se perdía la corporalidad total en el escenario. Lo idea: estar de pie, moverme en el espacio y contar con una persona camarógrafa que estuviera al tanto de mis movimientos y acciones, para no perder detalles.

Movimiento de la mesa/cámara. Mi computadora estaba sobre una mesa que se movía si yo me acercaba mucho y me apoyaba. Esto debí preverlo antes y solucionarlo. Es muy incómodo ver un espectáculo donde además la cámara se mueve innecesariamente.

Imprevistos que no tienen solución como: ¿Y si llueve, y si se va el internet, y si se va la luz? Era mucho el nerviosismo, entre los normales por salir a escena, otros por lo nuevo de presentarse en vivo por internet...además, estar preocupada de estos detalles que no podía controlar, realmente es un trabajo para personas con hígado y corazón grandes. Por ejemplo, en mi casa la señal de internet no es buena, así que le pedí a todos los de mi familia que no usaran el internet por una hora aproximadamente (lo que callamos las artistas que además no contamos con buena conexión).

Acciones que nos hicieron muy felices:

Presencia de asistente de producción. Yingry, se presentó en mi casa, nos aseguramos de seguir todas las medidas sanitarias indicadas por el Ministerio de Salud: mascarilla, lavado de manos, alcohol en gel y mantener nuestra distancia de dos metros. Además, era su primera vez haciendo estas labores de asistencia en producción con Raíz Teatro. La fraternidad siempre hace bien y el teatro es fraternidad. No se puede hacer teatro sola, mentira; ni para un monólogo siempre hay un equipo de trabajo detrás, al menos así lo creemos en Raíz.

Setear¹ la sala de mi casa. Entre Yingry y yo debimos: correr muebles, colocar la computadora en el mejor lugar (cerca del Router), colocar las luces de la mejor manera posible para que mi área de actuación estuviera relativamente iluminada. Probar sonido, probar audio y señal con el Facebook en vivo.

Resolver con fotografías la secuencia de movimiento. Dentro de mi biodrama tengo una secuencia de movimientos corporales que en definitiva, por la cámara con que contaba para este día, no podía hacerlos; así que resolví que en lugar de esos movimientos presentaría fotografías mías de cuando era niña, adolescente y joven. ¡Es tan hermoso el teatro que nos permite mutar, siempre! Esta es una de las razones del porqué una función nunca es igual que la otra, el teatro es el arte del ahora.

Documentación de la función. Para Raíz siempre es importante llevar una documentación a través de fotografías y videos de nuestros trabajos. Yingry se encargó de esto también.

Comentarios en vivo. Definitivamente una de los momentos más bonitos fue al final de la función cuando pudimos leer los comentarios que la gente iba poniendo durante el “en vivo”. No escuchamos los aplausos al final, pero sí sentimos su agradecimiento con sus palabras escritas en una actividad que luego, fue borrada de la red social. ¡Lo efímero del teatro!

Ansiedad y Asombro. Estos sentimientos fueron los que me acompañaron desde dos horas antes de la función, durante la función y en las siguientes horas. Porque el teatro es terapia en todo momento. El teatro es aprendizaje en todo momento. El teatro es retador en todo momento. ¡Déjese sorprender por el teatro! Vaya al teatro.

M. Ed. Katherine LaPey Peytrequín Gómez

Directora y Actriz, Investigadora, Docente, Bibliotecaria y Gestora Cultural

www.raizteatro.com

La directora, nos comparte:

1. ¿Cuánto fue el tiempo de ensayo (en meses y horas por semana)?

Ensayamos aproximadamente 6 meses, 2 horas por semana.

2. ¿Cuál fue el mayor reto durante el proceso de ensayos?

El mayor reto de los ensayos fue manejar el tiempo y energía de la actriz, puesto que tenía mucho trabajo dirigiendo los otros unipersonales. Sin embargo, siempre tuvo excelente disposición e ideas para contar una historia personal y necesaria.

3. ¿Qué es lo que más agradece del proceso de ensayos?

Trabajar con una amiga, verla crecer y ser fuerte en escena, verla darse en cuerpo y alma al hablar de un tema difícil para ella, pero necesario. Agradezco también el tiempo que permite Raíz para generar procesos creativos, uno siente como directora, calma y tranquilidad, se pueden probar diferentes cosas a partir de la improvisación.

4. ¿Cuáles fueron los principales temas de investigación para esta puesta en escena?

Investigamos sobre la obesidad, sobre los estereotipos que existen sobre los cuerpos, principalmente femeninos. Indagamos en las experiencias personales que ha vivido la actriz para a partir de ahí construir un texto.

1Ajustar un lugar para lograr que luzca como queremos que se vea la escena.